Los visitantes y vecinos del cementerio municipal San Miguel Arcángel de San Juan de los Morros, elevaron una vez más su voz de protesta en contra de las autoridades del camposanto, por mantener las instalaciones en mal estado y además por el incremento de la inseguridad en el lugar y sus alrededores. Los vecinos de la calle Santa Isabel, lugar en el que se encuentra el cementerio municipal aseguraron que cada vez son más los casos en los que los familiares que asisten a visitar a sus deudos, terminan siendo robados dentro del cementerio, aseguraron que esta situación se repite cada domingo cuando la mayoría de los sanjuaneros asisten al necrópolis a visitar la última morada de sus familiares. 

En relación a estas acusaciones el administrador del cementerio municipal, José Guzmán aseguró que como encargado de la seguridad y cuido del lugar hace lo posible por mantener los espacios libres de maleza, sin embargo manifestó que en estos momentos en que caen las lluvias de manera constante, el veneno para eliminar el matorral  se pierde a causa del agua caída.  En cuanto a los robos que presuntamente ocurren dentro del camposanto aseguró que estos solo los hacen después de las 5:00 –hora en que cierran el acceso al lugar-, por lo que ya no es responsabilidad de el como administrador lo ocurrido después de esa hora. Guzmán negó de forma rotunda que dentro del sacramental los amigos de lo ajeno se adueñen de las cruces y lapidas que los familiares realizan a las tumbas de sus deudos. 

 Yajaira Pérez vecina de la calle Santa Isabel; “El cementerio se encuentra un poco descuidado, por lo que invito a los encargados del lugar a que se avoquen a la limpieza y cuidado de los espacios de la última morada de quienes antiguamente habitaban la capital del estado. Por esta calle y en el interior del camposanto actualmente no ha habido casos de robo de los que yo tenga conocimiento”.

Francisco Gutiérrez comerciante de la zona; “La situación del cementerio es caótica, pues se encuentra en abandono total y la inseguridad es la reina de esta necrópolis. Aquí tenemos que vivir como presos con rejas en los comercios, pues en días recientes atracaron la farmacia que se encuentra al lado de mi negocio. Por esta calle la presencia policial solo se ve cuando pasa una patrulla a comprar en la farmacia o de paseo por esta zona, de resto nunca más se observa”.

Eva Rojas visitante del cementerio; “La verdad en estos momentos se encuentra enmontado, yo solicitó a los encargados del lugar que se avoquen a la limpieza del cementerio, pues en ocasiones a los familiares nos da miedo ingresar al camposanto, ya que allí se puede encontrar culebras y además personas escondidas que nos pueden atracar en cuanto lleguemos a la tumba de nuestros deudos. De verdad es un peligro venir a ciertas horas, pues no hay vigilancia”.  

Algunos familiares también denunciaron que en muchas ocasiones van a visitar a sus deudos y estos han sido desenterrados, presuntamente para vender nuevamente la parcela sepulcral.