Por pertenecer al partido Acción Democrática se le presentaron muchos inconvenientes cuando la revolución bolivariana comenzó a gobernar en Venezuela.

Es por ello que en el año 2006, Ángel Domingo Infante, quien residía en Altagracia de Orituco, tuvo que irse del país, tomando como destino Canadá, donde se instaló junto a su esposa, dos hijos y una hermana que para ese entonces fue destituida de PDVSA.

Ya con su familia en esa nación norteamericana, fueron los primeros venezolanos en solicitar refugio, entregando pruebas fehacientes sobre el porque estaban pidiendo ese asilo, el cual les fue otorgado de manera inmediata, y hoy en día ya ostentan afortunadamente la nacionalidad canadiense.

Actualmente está residenciado en la ciudad de Cálgary, provincia de Alberta, donde cuenta con un trabajo estable, además de prestar un servicio social, el cual no es otra que brindar esa mano amiga que ameritan sus compatriotas.

Si habláramos de la vida en general de Ángel Domingo un libro de quinientas páginas sería poco para hacerlo, porque han sido muchos los obstáculos que este gran hombre, gracitano de alma y corazón, los que tuvo que afrontar y de las cuales salió airoso, demostrando que cuando las cosas se hacen con amor, se pueden lograr sin ningún tipo de inconvenientes.